jueves, 20 de septiembre de 2012

EAT PRAY LOVE...


Puede sonar estúpido, casi infantil, pero no hay mejor momento cuando sin querer queriendo te sientes infinitamente identificado con una película, un libro o una frase. Anoche vi “Eat Pray Love” hace mucho que la quería ver pero no me había dado el tiempo, la película es muy buena y lo mejor de todo es que por primera vez en mucho tiempo me permitió irme a dormir sin pedirle a Dios que me ayudara a descansar. Dormí feliz y en paz.
Mientras miraba la película empecé a recordar mi vida hace un año atrás. Hace casi un año, decidí cambiar mi futuro, no estaba conforme con mis opciones en Conce y decidí jugar todas las cartas e irme a vivir a Stgo, una de las ideas mas locas que se me han ocurrido y que he podido concretar. Hace un año mi idea de un futuro era clara y enamorada, me veía pronto casada, viajando, después con hijos, con un hombre increíble a mi lado. Hoy ya no es así, pero en ese momento fue un sueño increíble.
Cuando se vino el quiebre en mi vida, me encontraba sola, lejos de mi familia, lejos de mis amigos, lejos de todo lo que siempre me protegió y consoló, pase mucho tiempo con pena y cuestionándome por que las cosas habían sido así, por que teníamos que sufrir, por que no se podía simplemente arreglar. Me costo mucho salir de eso, me refugie en gente que no conocía, no viaje a  ver a mi familia y amigos por mucho tiempo no me atrevía, y como todos te dicen tiempo al tiempo… ya vas a sanar.
Sin querer queriendo y aunque suene infinitamente cliché un día decidí cocinar. Me metí a internet, busque recetas, cosas que me podían gustar cosas que fueran ricas cosas que endulzaran las penas. Consecuencia nefasta, subí como 7 kilos (o mas) pero nunca me importo, necesitaba estar ahí, buscando un sabor nuevo para mi. Y me di cuenta que no se trata de cocinar manjares para los Dioses, se trata preparar manjares para quienes amas, cuando mis amigos me dicen un que rico te quedo, cuando una amiga me presenta “hola ella es la cami hace unas galletas increíbles” me di cuenta que cada vez que prepare algo rico, era muchísimo mas rico cuando le sacaba una sonrisa a mis amigos.
No tienen idea lo que me ha costado salir de la cocina, obliga a contratar un gimnasio (de verdad fue mucho), y entre recuerdo y recuerdo me di cuenta lo cercana que he estado a Dios y a la Mutter este ultimo tiempo, cuantas horas de conversaciones, cuantas horas de pensar y pensar, me da la impresión de que cada vez que llamaron a alguno de mis tíos a su lado, también me llamaron a mi, a no olvidarlos, a no dejarlos de lado, a recordar que siempre me están acompañando y que todo va a ir mejor, me he dado cuenta que desde hace casi un año todas las noches les he pedido por esa paz que tanto necesitaba, por esa calma que me consolara, por que las penas de amor sanaran y por el, porque el los necesitaba, quizás mas que yo.
Entre tanto pensar analizar y rezar, me di cuenta que era imposible conocer a alguien, mi estilo de vida estaba predispuesto a ocupar todos los espacios disponibles en ella y no le estaba dejando espacio a nadie para que entrara. Mi closet estaba lleno de punta a punta. Y sin querer un día en que salimos a ver que nos proponía la bohemia noche santiaguina, me veo en un local con 3 creyentes de otra religión, que iluminaron mi noche con consejos y puntos de vista que en ese momento parecían tan lógicos, pero que mi bloqueo mental, mi océano de ideas y preguntas no me dejaba ver. En un momento una amiga me cuenta una pequeña historia “una mujer estaba sola y se da cuenta que no había podido encontrar el amor, comenzó a analizar su vida y se dio cuenta que no hay espacio para que alguien entre en su vida, decidió cambiar la situación y partió por limpiar la mitad de su closet” (algo mas o menos así). Cuento corto, limpie la mitad de mi closet.
Desde ese día que a pesar de calmar infinitamente el tormento mental que tenia, solo me quedaba una duda (o 4 preguntas sobre lo mismo) que hasta anoche no podía calmar. ¿Que pasa si esto vuelve a ocurrir? ¿Qué pasa si me vuelvo a enamorar? ¿Qué pasa si vuelvo a dañar a alguien? O ¿si alguien me vuelve a hacer daño a mi?
El amor es una tormenta de sentimientos, el amor es algo que no podemos controlar, cuando alguien te ama te baja las estrellas y las pone a tus pies, te acompaña a rincones remotos y te sostiene cuando todo parece caer, el amor te hace llorar horas y también te hace reír, las mariposas en la guatita son reales, los nervios, todo eso tiene que pasar.
Anoche no tuve miedo de volver a amar, anoche me fui a acostar con una sonrisa y le di las gracias a Dios por todo. Por que he conocido a grandes amigos que me han cuidado en Stgo, por que he recuperado viejos amigos y parece que el tiempo no ha pasado, por que me ha dado fuerzas para seguir adelante y enfrentar nuevo desafíos, por que a partir de hoy ya no tengo miedo de volverme a enamorar, por que se que va a ser tan lindo y doloroso como es el amor. Y sea quien sea de quien me enamore, ten por seguro.. vas a comer rico y mucho, vas a creer que algo sobrenatural nos unió y vas a ser amado como nunca antes…

No hay comentarios: